Es común que el usuario conozca su necesidad, pero no la solución a ella. Es entonces que el Inbound Marketing funciona para atraer al cliente potencial, a partir de diversas estrategias en tres momentos diferentes, que lo llevarán a una experiencia exitosa en su búsqueda.
1.- Atracción: Lo primero es crear estrategias de Inbound Marketing para atraer a un público objetivo, a través de la creación de contenido de valor, el cual despierte el interés de los clientes potenciales. Esta estrategia de contenido debe acompañarse de una buena estrategia SEO, a partir de la utilización de palabras clave. Las tácticas más comunes en esta etapa del Inbound Marketing son: sitios web, publicaciones en blogs o redes sociales, anuncios o videos, principalmente.
2.- Interacción: En esta etapa es importante el equipo tanto de ventas como de atención al cliente, quienes permanecerán en contacto con el cliente o prospecto con la intención de ofrecer ventajas y soluciones, en vez de solo un producto o servicio. Los instrumentos de Inbound Marketing en esta etapa del proceso, los cuales permitirán la gestión de oportunidades de venta, son: bots conversacionales, email marketing, automatización del marketing, landing pages, formularios, entre otros.
3.-Deleite: En este último momento el Inbound Marketing deberá garantizar que el cliente se sienta satisfecho, incluso después de un tiempo de haber realizado la compra. Como ejemplo de algunos de los elementos utilizados, están las encuestas en redes sociales o email, etc.
Dentro de los beneficios que se obtienen con el buen manejo del Inbound Marketing están: el aumento del número de suscriptores, así como que la marca se convierta en una voz experta. Y, por supuesto, se dará un mayor conocimiento o alcance de la marca, con lo cual se propiciará un aumento de ventas.